Estas herramientas recomiendan el volumen de caldo a pulverizar teniendo en cuenta las características del cultivo, tipo de vegetación, plagas y productos a aplicar. El uso de estas herramientas logra una reducción del volumen aplicado respecto al uso convencional. Como consecuencia, se logrará una disminución del uso de plaguicidas y un uso más sostenible de los mismos